Antigüedades : "Au fil du temps"

Esta escena ha sido publicada en la revista “Miniaturas” de julio 2007.

"Le fil du temps" es literalmente el hilo del tiempo, o el curso del tiempo.
"Au fil du temps" quiere decir "a lo largo del tiempo", lo que en inglés se traduce como "as time goes by" (la famosa canción de la película Casablanca). Dudé mucho entre el inglés y el francés, pero opté finalmente por el francés porque hablándolo también en casa me parecía más bonito.
Esta escena es una escena conjunta, hecha en colaboración con amigos miniaturistas. Se escoge un tema común y cada participante elabora una escena a su propia manera. Luego se intercambian objetos entre todos los participantes que van a colocarse en la escena.

Mi escena está hecha en una caja de vinos. Un día vi a un vecino mío saliendo con esta caja debajo del brazo, dirección contenedores de basura. Le pregunté si la iba a tirar, y me contestó que sí. Y claro, ya os imagináis que no le pude permitir cometer esa barbaridad y me la regaló.
Unas semanas después le enseñé su caja de vinos transformada, y no se lo pudo creer. Me prometió regalarme todas sus cajas en el futuro (es inglés, y le gusta el vino español).

Primero vestí las paredes con una tela adecuada, de color beige y pinté el techo. No se ve desde fuera, pero queda mejor cuando se abre la caja.
En la tapa corredera horadé los huecos del escaparate y de la puerta. Luego corté y pegué los listones de madera alrededor de la ventana y en la puerta, pegué las molduras (regalos de amigas), una cuerda torcida dorada y la vidriera de Montse y luego lo pinté todo en color marrón chocolate y oro. También tuve que hacer más ancha la apertura de la caja por donde corre la tapa, porque los listones pegados encima de la tapa la hacían más gruesa.

Posteriormente construí el escaparate, e instalé una cortina roja al lado derecho, colgada con anillas en una barra de madera.
El letrero grande con el nombre de la tienda está pintado a mano sobre un resto de madera que corté.
Las letras las saqué de Word y las calqué sobre la madera, tras haber pintado todo el resto de la caja en el color marrón.
Para terminar añadí unas molduras más, y unos detalles como el timbre, la estrellita y el pomo de la puerta (que tengo que sacar para poder abrir la caja), la cerradura, el buzón (repujado en latón), etc.
Y como toque final un poco de pintura oro en las molduras.

Los objetos que hice para los demás fueron tres benditeras, una carbonera y una herradura.

Lo más bonito de todo, claro, ha sido la colocación de todos los regalos recibidos en el escaparate: antigüedades y curiosidades de muchos estilos, hechas con mucho arte y sobre todo cariño.